MADRID 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Consejo General de Enfermería (CGE) ha reclamado este viernes la implementación de medidas políticas y legislativas para "luchar" contra la "lacra" del maltrato y la discriminación contra las personas mayores, y es que uno de cada seis mayores de 60 años sufre este tipo de actos, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
"Actualmente, vivimos en una sociedad plural, en la que la tolerancia y el respeto deben ser los pilares de la educación. Las enfermeras como profesionales más cercanos al paciente, debemos estar ahí para ayudar y educar en todas las etapas de la vida. Nos encontramos con una situación extremadamente grave a la que hay que poner freno desde la infancia", ha afirmado el presidente del CGE, Florentino Pérez Raya.
Tras ello, ha expresado que la sociedad concibe el envejecimiento como un "problema" y que se "bombardea con discursos negativos" sobre la edad, lo que hace que estas personas acaben por "asumir" que sus problemas son una "parte inherente" a la vejez.
"No podemos permitir que nadie, por el simple hecho de la edad que tenga, sufra cualquier tipo de discriminación en su entorno familiar, laboral y social", ha añadido.
Por su parte, la enfermera experta en abuso y maltrato y profesora del Instituto de Formación Sanitaria ISFOS del Consejo General de Enfermería, Mayte Soy, ha afirmado que la "ola de edadismo o la gerontofobia" pondrá "en jaque" el proceso de envejecimiento.
"La enfermería no sucumbe a tal equivocado paradigma porque la ética profesional pone en valor una atención centrada en la persona y en las necesidades humanas. Enfatizamos que no es la edad en sí misma, lo que determina la necesidad de cuidados, sino el estado de salud y circunstancias. Así mismo que vinculamos el acompañamiento empático en todas las versiones del cuidado. Más aún lo erigimos más prioritario si cabe, en el contexto de la feminización de la vejez, violencia y maltrato, pues añade mayor peso al estigma de la edad. Se requiere erradicar las actitudes edadistas para normalizar las que visibilizan y denuncian", ha añadido.
La experta ha insistido en que el autocuidado y el empoderamiento de estas personas se "entrelaza" con el envejecimiento activo, lo que "favorece" una vejez más saludable, autónoma y plena, especialmente en un mundo cada vez "más envejecido" y con un aumento de las enfermedades crónicas.
"La vejez no es una etapa aislada del resto, sino articulada con las anteriores con características propias como lo han sido la debilidad en la etapa infantil y el arrojo en la juventud. A la trazabilidad de que la vejez no 'aparece de pronto', debemos prepararnos para envejecer abriendo nuestra mente y no anticipando reproches altruistas. Si la proyectamos positivamente en nuestras vidas, puede ser una etapa significativa en nuestra biografía y llena de oportunidades para seguir creciendo como personas", ha manifestado.
Por último, ha subrayado el papel de los enfermeros a la hora de concienciar para prevenir el edadismo, reconociendo que las personas "muchas veces sin darse cuenta" acaban infantilizando a las personas mayores, o incluso se les llega a no escuchar o a tratar como si no fuesen autosuficientes.